En las hamacas infantiles, el bebé podrá pasar mucho tiempo relajado, ya que son muy cómodas y, al estar elevadas, les permiten también jugar sin que les suponga ningún peligro. Para que las hamacas sean especialmente cómodas, procuraremos que los asientos sean acolchados y blanditos. La base puede ser estática o con mecedora, para que se mueva a modo de balancín.
Algunas hamacas para bebé disponen del llamado «centro de actividades» para que el pequeñín se entretenga jugando con los elementos colgados del arco para juegos, tal es el caso de las hamacas Babybjörn modelo Balance o las propuestas de Fisher-Price.
Entre las ventajas de las hamacas para niños también destaca que la mayoría disponen de asas y de un plegado cómodo, por lo que es fácil de trasladar y de guardar tras su uso doméstico sin ocupar demasiado espacio.
Para garantizar la seguridad del niño se recomienda colocar las hamacas infantiles en el suelo y evitar las alturas u superficies en las que podría no mantener la estabilidad, como por ejemplo la cama, el coche o el sofá.
Las hamacas para bebé suelen ir provistas de sistemas de seguridad con arneses que se bloquean y de reclinación para ubicarlos en la posición deseada. Para mayor seguridad debemos leer la documentación adjunta al modelo para aplicar correctamente el sistema. El revestimiento debe ser de un tejido transpirable y fácil de lavar.
Muchas de las hamacas infantiles que te ofrecemos en Baby Cotton disponen de tres posiciones: jugar, descansar y dormir; asimismo sus tejidos son lavables a máquina y están garantizados. Un ejemplo, son las prácticas hamacas BabyBjörn Balance disponibles en infinidad de colores, así como otras que incorporan melodías, respaldos regulables y reclinables, capota, etc.
¿Todavía no te has decidido por una de nuestras hamacas para niños? Deja a un lado tus dudas por las hamacas para bebé son excelentes accesorios para propiciar el movimiento y desarrollo infantil.